Una vez conseguido este objetivo, toca volver a la normalidad y a los asuntos diarios. La gráfica, el objetivo y los resultados no dan mucho de si, ni para la memoria ni para la historia. Lo que si guardare son los resultados, lo que si que guardare es la travesía por el Perdido como una de las mejores salidas al monte que he realizado, y en la que la compañía tuvo mucho que ver.
Pero ahora y aquí no toca hablar de la excursión, sino del régimen y la preparación a la que me sometí este pasado mes de junio, y de la que si he aprendido algo, y es la de poner un objetivo diario en el régimen, de asignar a cada día una parte de ese objetivo. Es el primer régimen entre muchos intentos que me ha funcionado, así que voy a seguir hasta la próxima salida.
Los resultados se dicen en pocas palabras, de 102 el peso máximo a 93,8, para mantenerme en 95. Hace mas de 10 años que no veía esos número en la báscula. Lo he conseguido.
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